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Situado a poco más de 40 km de Peñíscola, tiene una serie de recursos turísticos únicos donde destacan las pinturas rupestres, declaradas Patrimonio Mundial por la UNESCO en el año 1998. El Barranco de la Valltorta, dentro del Parque Cultural Valltorta-Gasulla, con numerosos abrigos que albergan infinitas figuras que datan del Paleolítico Superior las más antiguas, y el Museo de la Valltorta, creado en 1994, en el que se hace un recorrido por sus salas de la historia del arte rupestre. El museo es, además, el punto de partida de las visitas guiadas a los conjuntos de pinturas rupestres protegidos y restaurados.

Desde 2014 Tírig alberga el Museo Puig Roda. Gabriel Puig Roda (1865-1919), pintor nacido en Tírig, que tras ser becado por la Diputación de Castellón, estudió en la Escuela de San Fernando de Madrid, cuya institución le otorgó otra beca para ir a Roma. Viajó a Pisa, Génova, Milán y Bolonia entre otros, lugares donde tomó apuntes de paisajes y rincones típicos que le sirvieron para sus composiciones. En este museo se exponen muchos cuadros originales y algunas réplicas.

Tírig cuenta en su patrimonio con un conjunto de construcciones de piedra en seco por todo el término. Paredes, abrevaderos, azagadores, pozos, cisternas y hornos lo forman, pero destacan las barracas conocidas también como casetas de pastor, de las que se han catalogado aproximadamente unas 1400. Muchas de estas construcciones aparecen en el trazado de las rutas de senderismo existentes en el término municipal. Para todo amante del deporte y la naturaleza, existen una serie de rutas de diferentes distancias y dificultades que se pueden hacer a pie o en bicicleta.

Como monumentos destaca la iglesia parroquial Nuestra Señora del Pilar, de finales del s. XVII, que presenta en su campanario un reloj de sol con los signos del zodíaco, ubicada en el centro del casco urbano del municipio. La ermita de Santa Bárbara, monumento del siglo XVII, el Pozo de la Vila, construido por tropas francesas a principios del s. XIX, y el Pozo de la Cadena fuera del núcleo urbano.

A lo largo de todo el año se celebran varias festividades. En julio son las fiestas patronales, en honor a Sant Jaume, con varios actos para todos los públicos. La romería a Santa Bárbara en diciembre, la celebración de San Antonio en enero o las fiestas de quintos en semana santa con tradiciones únicas que sólo se celebran en Tírig.

La gastronomía se basa en los productos tradicionales de la tierra. La ‘llanda al forn’ y ‘olla de cigrons i cardets’ son los platos típicos de Tírig. En la repostería no hay que dejar de probar les ‘coquetes’ y la coca de miel.